¿Y si les damos otra oportunidad?

En todas las casas existe un juguete que ya no se usa y que de seguro se encuentra en prefecto estado, o por lo menos en un buen estado general. Esto sucede porque la mayoría de los juegos y juguetes están hechos literalmente para durar muchos años, nuestros niños van creciendo y con ello van cambiando sus intereses.

¿Recuerdas Toy Story?

Esta maravillosa historia creada por Pixar Animation Studios y Walt Disney Pictures nos habla sobre la niñez de Andy, un niño común de ciudad que tiene una serie de juguetes que sin lugar a dudas a todos nos entretuvieron con sus locas aventuras remontándonos a nuestro propio pasado no muy lejano en el que la fantasía y el juego eran el centro de nuestras vidas. Pues Andy creció y antes de irse decidió darle a sus mejores amigos, los juguetes un nuevo hogar para que así hicieran felices a otro niño, en este caso la afortunada fue "Lili", una simpática pequeña de su vecindario que recibió este gran tesoro de Andy no sin antes jugar por última vez con ellos para explicarle a Lili los secretos, aventuras e historias que Andy había vivido junto a sus más grandes amigos durante esos años. Luego de esto, Andy se fue a la universidad para hacer una nueva vida y el resto de la historia ya la conocemos...

"La nueva normalidad"

Un término acuñado a nuestro verbo y que es sin duda la descripción más rara que nos toca entender ¿De que se trata? ¿Más incertidumbre? pues no, creemos en Parquetrópolis de Colombia que es una oportunidad para aplicar cambios y mejoras en nuestras sociedades de forma individual y colectiva, la vida nos ha enseñado a que el gastar por gastar ya no vale y si vamos a comprar que sea de una forma más inteligente.

¿Y si ese juguete que ya no usas te genera un ingreso?

Como padres siempre vamos a querer que nuestros hijos tengan lo que necesitan y entre esas cosas están los juguetes ¡Si, los juguetes!, porque jugar es un acto natural en la edad infantil, es el medio por excelencia para el aprendizaje "El arte del juego promueve la inteligencia". Pero la realidad es que con los últimos acontecimientos nuestros gastos o inversiones como padres deben ser ajustados a la realidad que tenemos.

Así que hagamos un ejercicio mental:

Mi hija mayor tiene la misma bicicleta desde los 5 años y acaba de cumplir 8, es obvio que ya necesita una más grande, pero "es rosa" de manera que a menos que la pinte no la puedo transferir a mi hijo menor de 4 (el cual ya tiene una), entonces yo podría venderla y con lo que obtengo puedo hacer 2 cosas: Completar y comprar una nueva o completar y comprar una usada en buen estado para que la use un par de años. En todo caso ya es seguro que no me toca hacer la inversión por el valor total, pues de la bicicleta anterior he obtenido un precio justo y cualquiera de las 2 decisiones es válida... Como decíamos, los niños crecen y con ellos cambian sus intereses y necesidades, nuestro mundo necesita que seamos más prácticos y menos consumistas, los ingresos per cápita se verán ajustados y/o comprometidos en muchos paises y es por eso que apostamos a una economía circular que nos permita aprovechar mejor nuestros recursos.

Luis Ramirez

CEO

Parquetrópolis de Colombia.